Durante muchos años, la cúrcuma ha sido valorada por sus usos medicinales y cosméticos. Aunque normalmente se usa como ingrediente culinario, muchas personas prefieren usarlo por sus efectos curativos. ¿Sabías que puedes usar la cúrcuma para tratar el acné? Hoy te contamos cómo.
La cúrcuma tiene un compuesto biológicamente activo llamado curcumina, que le da su color característico y gran parte de sus propiedades. Esta sustancia actúa como antiinflamatorio y antioxidante, haciéndolo útil tanto interna como tópicamente.
Por lo tanto, no sorprende que sus extractos se utilicen en dermatología. Aunque la investigación sobre sus propiedades continúa, actualmente se acepta como un remedio natural para problemas como el acné. ¡Pruébalo!
Hay varios e interesantes beneficios de usar la cúrcuma para tratar el acné. En primer lugar, es importante destacar sus propiedades antibacterianas capaces de combatir microorganismos como P. acné cuando se combina con ácido láurico. Su efecto es comparable al de fármacos como la eritromicina y la clindamicina.
Por otro lado, esta maravillosa especia tiene efectos antiinflamatorios que inciden positivamente en los problemas dermatológicos. Aunque necesitamos más evidencia científica para verificar su efecto sobre el acné, la evidencia anecdótica sugiere que es efectivo.
La cúrcuma y sus antioxidantes también tienen otros efectos importantes cuando se trata de tratar el acné. Aplicarlo tópicamente ayuda a reparar el tejido, minimizando la presencia de cicatrices. Asimismo, estimula la producción de colágeno y reduce el riesgo de aparición de arrugas prematuras.
A diferencia de otros tratamientos más convencionales, el uso de la cúrcuma para el acné tiene otros efectos importantes en la salud de la piel. Gracias a la curcumina, las vitaminas y los minerales que contiene, es una buena mejora para la salud de la piel. Entre otros beneficios, la cúrcuma:
Para aprovechar al máximo las propiedades de la cúrcuma para tratar el acné, te proponemos un tratamiento en el que amplificamos su efecto utilizando los componentes del aceite de coco. Este ingrediente natural contiene ácido láurico, reconocido por su efecto antimicrobiano, y útil para tratar el acné.
Además, el aceite de coco ha sido ampliamente estudiado en dermatología, ya que hidrata la piel y ayuda a tratar enfermedades como la psoriasis y el eczema. Al igual que la cúrcuma, incluso ayuda al proceso de cicatrización y regeneración, minimizando los efectos negativos de los radicales libres.
Nota: los resultados no serán visibles inmediatamente. Es importante usar este remedio de manera constante para lograr los resultados deseados.
Aunque este tratamiento con cúrcuma puede ser muy efectivo para eliminar el acné, debes saber que puede causar efectos secundarios. Cuando se aplica tópicamente, puede manchar temporalmente la piel o dejar un residuo amarillo claro. Esto suele desaparecer con una buena limpieza.
Sin embargo, a veces los componentes pueden causar reacciones alérgicas o dermatitis de contacto. Una revisión realizada en 2015 encontró que la curcumina es un alérgeno y puede causar irritación, enrojecimiento e hinchazón en personas alérgicas.
Debido a lo anterior, es mejor hacer una pequeña prueba antes de aplicar el tratamiento completo para el acné. Todo lo que necesitas hacer es poner un poco de cúrcuma en tu antebrazo u otra parte de tu piel. Si, después de 24 horas, no hay reacciones negativas, entonces es seguro usarlo.
La cúrcuma puede ser una gran aliada en la lucha contra el acné, especialmente cuando la combinas con aceite de coco. Debe usarlo con precaución, ya que puede causar una reacción alérgica en algunas personas. Para todos los demás, es una excelente opción para complementar otros tratamientos convencionales para eliminar el acné.